Mostrando entradas con la etiqueta ROMA. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ROMA. Mostrar todas las entradas

HARPÍAS




En la mitología griega, las Harpías o Arpías (en griego antiguo Άρπυια Harpyia, ‘que vuela y saquea’) eran hermosas mujeres aladas conocidas principalmente por robar constantemente la comida de Fineo antes de que éste pudiera comerla, haciendo cumplir así un castigo impuesto por Zeus.

Esto las llevó a pelear con los Argonautas. En tradiciones posteriores fueron transformadas en genios maléficos alados de afiladas garras, que es como se les conoce popularmente.

Raptoras de almas y de niños.

Hijas de Taumante y de la Oceánide Electra. Pertenecen a la generación preolímpica, por lo que no están sujetas a los dictados de los doce dioses del panteón helénico.

Las Harpías suelen ser dos: Aelo (borrasca) y Ocípete (vuelo veloz), a veces se nombra a otras como Celeno, Nicótoe y Podarge.

Son aves con cabeza de mujer y garras afiladas o mujeres aladas.

En un principio los autores sitúan su morada en las islas Estrofíales, en el mar Egeo, más tarde la sitúan en el vestíbulo de los Infiernos, junto a los demás monstruos.

La Harpías uniéndose al dios viento Céfiro engendraron a los caballos Janto y Balio, corceles divinos de Aquiles, y a Flógeo y Hárpago, las monturas de los Dioscuros.

En la leyenda del rey Fineo representan su papel más destacado, aunque aparecen con cierta frecuencia en uno u otro mito.

Wikipedia


Imagen
albherto.wordpress.com

TEMPLO DE JANO QUIRINO

Vigilante del equilibrio del universo

El templo de Jano Quirino estaba situado en el siglo I d.C. cercano a la Curia, en la calle Argiletum, en una zona importante que unía el Foro y las áreas residenciales en el noreste.

Era un templo pequeño, realizado en madera, características que sugieren que el culto era de origen antiguo.

Varios hechos lo confirman: Las listas más antiguas de los dioses por lo general comenzaban con su nombre; él era también llamado "DIVOM DEUS", una forma muy antigua en latín que significaba "el dios de los dioses"; y su imagen se puede encontrar en las monedas romanas más antiguas.

Jano también recibe el nombre de "Principium Deorum" el dios del principio, teniendo este término un significado sagrado.

"PRINCIPIUM" se escribía en griego como ARKHÉ. Es por ello que Jano es el dueño del ARKHÉ.

El edificio era de forma perfectamente cúbica y de dimensión de 20 codos (8,88 m.) en altura y en cada uno de los lados de su planta cuadrada.

El recinto central del templo estaba remarcado por las doce columnas que equivalían a los doce signos zodiacales, en el mosaico central y delante de la figura del dios se presentaba la rueda cósmica.

El pavimento tenia mosaicos alegóricos al cielo, el mar y la tierra y en lugares específicos el símbolo del nudo de Salomón.

La figura del dios situada sobre un pedestal en el eje central del edificio miraba simultáneamente a oriente y occidente. Su posición permitía que en el momento que las puertas del templo estuvieran abiertas el dios podía influir de manera directa en la actividad de los hombres.

Por ello en tiempo de guerra, la máxima expresión de caos, el templo permanecía con sus puertas abiertas como plegaria para la intermediación del dios para la consecución del nuevo equilibrio de la paz.

Su estatua ostentaba en la mano derecha el numero 300 y en la izquierda el 55 como alusión exacta a la totalidad de la duración del año romano antiguo, o sea el "anillo" del tiempo.



Templo de Janus

JANO QUIRINO

El Dios Jano Quirino y Rómulo que se divinizó en él son los fundadores mitológicos de la ciudad de Roma.

Existía una raíz común para los términos quirites, curia y quirinus; la raíz co-virio que significa colectividad, conjunto de individuos o personas y por extensión ciudad. Fue Rómulo el creador de las curias como estamento principal de la organización social de los romanos, función que cumple el dios Jano Quirino como protector de los habitantes de las ciudades.

Quirites era el nombre que se les daba a los ciudadanos romanos en su calidad de no soldados en tiempos de paz. Al nombre quirites, pues, se le contrapone el nombre milites (ejército, soldados).

Su templo se encontraba emplazado dentro de la ciudad en una zona muy próxima a la Curia.

Jano Quirino es un dios paralelo a Marte y contrapuesto a él. Jano Quirino, al venir de quirites, es el dios tranquilo opuesto al dios de la guerra, en algunos textos se le considera como un dios simétrico a Marte, incluso se le menciona como "Marte pacífico", por eso está su templo dentro de la ciudad, a diferencia del templo de Marte que se encuentra extramuros.

Dice Vitruvio: "A Marte dándole su templo fuera de la ciudad no habrá guerras y discordias civiles".

Quirino vela por los ciudadanos. Era honrado en la antigua colina del Quirinal, la mas alta de las siete de la ciudad de Roma, mediante unas fiestas llamadas Quirina.

RES GESTAE DIVI AUGUSTI

Octavio Augusto escribió: "El templo de Jano Quirino, que nuestros ancestros deseaban permaneciese clausurado cuando en todos los dominios del pueblo romano se hubiera establecido victoriosamente la paz, tanto en tierra cuanto en mar, no había sido cerrado sino en dos ocasiones desde la fundación de la Ciudad hasta mi nacimiento; durante mi Principado, el Senado determinó, en tres ocasiones, que debía cerrarse."

JANO, EL AÑO Y LOS SOLSTICIOS



El templo del Argiletum no era el único lugar donde los Romanos adoraron a Jano. Del otro lado del Tiber, un altar fue dedicado a este dios en la colina de Ianus (Ianiculum).

Un segundo altar fue erigido sobre la colina Oppius, que desempeñaba un papel principal en las ceremonias de iniciación cuando los niños se hacían hombres.

El cónsul Marcus Duillius construyó un templo sobre el Mercado de la Verdura (el Foro Holitorium), después de su victoria naval de Mylae (260 a.C.). Fue reconstruido más tarde por el emperador Tiberius. En este templo, doce altares fueron erigidos y dedicados a los doce meses.

También existió el Arco de Ianus Quadrifons, en el Velabrum.

© Carlos Sánchez-Montaña

Fuente
http://eltablerodepiedra.blogspot.com/2008/03/templo-de-jano-quirino-en-roma.html


LA ENEIDA




Dentro de las diversas obras literarias que se crearon bajo el tutelaje de Augusto, se encuentra “La Eneida” compuesta por Publio Virgilio Marón. Este poema épico es singularmente importante, en primer lugar porque desde el momento que comenzó a circular se transformó en la epopeya nacional romana. En segundo porque estableció la versión definitiva de los mitos sobre la fundación de Roma y finalmente por que justificaba la política expansionista latina y el gobierno autocrático de Augusto. Por eso es que resulta importante conocer las ideas mitológicas e históricas que hay detrás de este texto.

Según “La Eneida” tras la guerra de Troya, Júpiter decidió evitar que los pueblos se destruyeran en guerras tan sangrientas. Con ese fin ordenó a uno de los pocos sobrevivientes de Troya que fundara una nación que llevara paz y prosperidad al mundo. Esta nación debía establecerse en la península itálica.

En su viaje, Eneas encalla con sus hombres en las costas de Cartago que había sido fundada hace poco y aún reinaba su primera Reina, la legendaria Dido. Dido se enamora de Eneas y le pide que se quede con ella en Cartago. Eneas duda, pero finalmente decide cumplir con la misión que le encargaron los dioses y parte hacia Italia. La Reina, sintiéndose traicionada conjura una maldición contra Eneas y la raza que fundará, esta maldición es un anuncio de la guerra que siglos después enfrentaría a Roma contra Cartago.

Una vez en Italia, Eneas y su séquito se establecen en la región del Lacio, donde son bien recibidos por el Rey Latino que daría nombre al pueblo que surgiría en esa región. Sin embargo un importante sector de los habitantes del lugar, liderados por Turno, no aceptan a los troyanos. Tras un duro enfrentamiento, Eneas se impone a Turno y logra establecerse en el Lacio, fundando la ciudad de Alba Longa.

Tras su muerte, Eneas es sucedido por su hijo Iulo y una larga estirpe de reyes. Pero los problemas comienzas dinástico comienzas tras la muerte del sabio Rey Procas. El menor de sus hijos, Amulio usurpa el trono y exilia al legítimo heredero Numitor. A Rea Silvia, la hija de Numitor, la obliga a volverse Sacerdotisa Vestal, para que mantenga la virginidad y no pueda engendrar ningún hijo. Sin embargo el dios Marte, seduce a Rea Silvia y de la unión nace dos gemelos Rómulo y Remo.

Rea Silvia debe exiliarse y Rómulo y Remo quedan bajo el cuidado de una loba en las orillas del Tiber. Sobre este río fundan la ciudad de Roma y tras una disputa, Rómulo mata a Remo y se constituye en el primer Rey de Roma. Como en esta ciudad reina el heredero legítimo de Eneas, Roma le quita la supremacía del Lacio a Alba Longa.

Cuando los reyes latinos son sustituidos por los etruscos, se corre el riesgo de perder el legado sagrado, por eso es que se hace imperativo echar a los reyes y constituirse en una República. Bajo la República Roma fue expandiéndose, llevando la paz y las leyes a regiones cada vez más lejanas.

Irónicamente, con el paso del tiempo, el peor enemigo de la misión divina de Roma eran los propios romanos, ya que constantemente combatían entre ellos en guerras civiles. Con este fin los dioses nombraron a un descendiente de Enas y Iulio, tal como su nombre lo atestigua, Cayo Julio César (Caius Iulius Caesar) para que restableciera la paz y tutelara el buen funcionamiento de la República. Como César fue asesinado, esta misión fue completada por su legítimo heredero, Cayo Julio César Octaviano, conocido como Augusto y desde entonces, el linaje de los Julios tiene la obligación y el honor de velar porque Roma cumpla con su misión divina.

Fuente:
http://e-historia.es
Imagen
portalplanetasedna.com.ar