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AUTONOMÍA SANTIAGO DEL ESTERO

La Sala de la Autonomía, presidida por las destacadas figuras del Brigadier JUAN FELIPE IBARRA y del Coronel JUAN FRACISCO BORGES.
Museo Histórico de la Provincia de Santiago del Estero “Dr. Orestes Di Lullo"


LA POSICIÓN DE SANTIAGO DEL ESTERO


Cuando en 1810 arribó la noticia de la Revolución de Mayo, el Cabildo de Santiago asumió la misma actitud de precaución que las demás tenencias de gobernación, aguardando la respuesta de la cabecera intendencial (Salta). Una vez conocido el pronunciamiento favorable de Salta, el Cabildo santiagueño adhirió a la causa.

El primer problema de Santiago del Estero con el gobierno central surgió a raíz del decreto del director supremo Gervasio Posadas del 8 de octubre de 1814 que establecía que las jurisdicciones de Salta, Jujuy, Orán, Tarija y Santa María pasaban a integrar la provincia de Salta con capital en la ciudad del mismo nombre. El resto de la antigua gobernación de Salta del Tucumán pasaba a formar la provincia de Tucumán, comprendiendo Tucumán, Santiago del Estero y Catamarca. De esta manera, la rivalidad existente entre Tucumán y Santiago del Estero desde la época colonial se agudizó con la dependencia impuesta a la última por el Directorio. El teniente de gobernador Pedro Domingo Isnardi, destituido por disentir con el gobernador tucumano Bernabé Aráoz, describía en una carta al director supremo Alvarez Thomas la situación de penuria económica y el carácter arbitrario de la política del gobierno tucumano:

Conocen los ciudadanos de Santiago la incumbencia a su libertad y principales derechos pués estando obligados al fomento de su país y de la de uno en particular ben con el mayor dolor que la Intendencia de Tucumán le priva arrastrando para sí los recursos: Ven que con la mayor injusticia y grosería se quita de la caja de Santiago y se manda llevar a Tucumán por menor que sea el fondo de sus entradas y que no se deja una sola moneda; y ven que mientras con este dinero se pagan los sueldos de la Intendencia y se cuvren los débitos de los tucumanos no se pueden cubrir ni hay lugar para las erogaciones de Santiago (...). (1)

No obstante ésta y otras notas enviadas al director Alvarez Thomas, (2) éste asumió una actitud prudente, desentendiéndose del problema y posponiéndolo para que fuera resuelto por el futuro congreso. Los autonomistas santiagueños llevaron a cabo entonces el primer movimiento revolucionario el 4 de septiembre de 1815 encabezado por Francisco Borges y que fue reprimido por el gobernador Aráoz.

El 20 de abril de 1816 los diputados santiagueños Pedro León Gallo y Federico Francisco de Uriarte se incorporaban al Congreso de Tucumán. Pero cuando el Congreso sancionó la primera versión del Reglamento Provisorio, en noviembre de 1816, modificando la forma de elección de los gobernadores y tenientes de gobernador -antes elegidos por las provincias y en adelante librados al arbitrio del director supremo- (3) estalló en Santiago el 10 de diciembre de 1816 un segundo movimiento revolucionario liderado nuevamente por Borges. El levantamiento fue sofocado por Manuel Belgrano y Borges fue fusilado el 1º de enero de 1817. Algunos datos podrían relacionar este movimiento con el artiguismo, pero en realidad no son suficientes para dar por sentada la vinculación. (4)

La disolución del gobierno central como consecuencia de la batalla de Cepeda (1º de febrero de 1820) impuso a la provincia de Tucumán la necesidad de reasumir sus derechos. Para el gobernador Aráoz, la conformación de la denominada República del Tucumán (integrada por la provincia del mismo nombre, Catamarca y Santiago del Estero) así como la adopción de una Constitución propia para dicha jurisdicción era un paso indispensable para preparar la organización nacional. Mientras muchas provincias se disgregaban en forma de un autonomismo municipal como La Rioja, San Juan y San Luis, Aráoz pretendía conservar la integridad de su provincia. (5) Para definir claramente dicha organización era necesaria la reunión de un congreso que representara a las partes.

En medio de esta situación, en Santiago del Estero se generaba un ambiente de autonomía incentivado por la caída del gobierno central. A fin de asegurar la participación de los santiagueños en el congreso que debía organizar interinamente la provincia, Aráoz envió a Juan Bautista Paz para que preparara la elección de diputados y sostuvo la misión con la presencia disuasiva de una fuerza militar al mando de Juan Francisco Echauri. Una de las primeras medidas de Echauri fue disponer el cambio de los miembros de la municipalidad por personas adictas a la causa de Tucumán. Poco después pretendió controlar las elecciones de los diputados que debían concurrir al mencionado congreso a reunirse el 20 de marzo de 1820 en Tucumán. Ante el hecho, el pueblo santiagueño se rebeló apoyado por la fuerza de Juan Felipe Ibarra, jefe del destacamento de Abipones, quien venció a Echauri (31 de marzo de 1820) y lo obligó a retirarse a Tucumán.

Ibarra fue designado entonces primer gobernador de la provincia y en un manifiesto del 27 de abril declaraba la autonomía de Santiago del Estero. Esta fue finalmente reconocida por el tratado de Vinará (5 de junio de 1821) que selló la paz entre Tucumán y Santiago.

La influencia del artiguismo en esta etapa se advierte un poco más claramente. Existió una comunicación de Artigas al Cabildo de Santiago, del 18 de febrero de 1820, a través de Ventura Martínez. Aunque este documento se ha perdido, se conoce el oficio de respuesta que enviara el Cabildo santiagueño. En él puede advertirse el interés por conservar los lazos con el Protector a fin de lograr la organización definitiva del país y la defensa de los intereses locales y nacionales bajo bandera del federalismo:

(...) Damos mil gracias a V.E. por los nobles y libres sentimientos que se digna comunicarnos: hasí como por los generosos y heroicos esfuerzos conque al frente de los imbencibles Extos de la Banda Oriental, de Entre Ríos y Santa Fe ha conseguido al fin redimir estas provs de un sistema libertisida cuio objeto hera entregar estas Provs a un ramo de la familia de Borbón y de estableser en estos Paises una monarquía todavía más tiránica que la de los españoles- Los ciudadanos de este Pueblo hacaban de asegurar la libertad de sus elecciones violada el 1 de febrero pasado:

Los progresos qe an hecho entre nosotros las ideas federales cuia base es la libertad y la igualdad del sistema representativo, nos han alentado a dar este paso para sostener nuestros derechos violables = Tenemos el honor de hasegurar a V.E. que siempre nos encontrará dispuestos a contribuir a cuanto esté en nuestro alcance para hasegurar la integridad del territorio de la Confederación contra las combinaciones de la ambición extranjera (...) (6)

El Cabildo comunicaba pues su reciente autonomía y se pronunciaba por la causa de la federación, comprometiendo su colaboración en caso de necesitarlo Artigas para enfrentar a los portugueses. Nada expresaba respecto de colaborar en la lucha contra los porteños.

Santiago, al igual que Córdoba, no compartió los ideales confederales de Artigas. Sin embargo, ambas provincias asumieron una posición netamente federal, brindando su apoyo al Protector sólo en la medida que sus intereses lo permitían.

NOTAS

1. Carta enviada desde Frontera de Abipones el 18 de mayo de 1815, citada en Alfredo Gargaro, “Los orígenes de la autonomía santiagueña”, Revista del Museo Mitre, año II, núm. 2, 1949, p. 57. La carta fue escrita por Isnardi un mes después de que fuera destituido de la tenencia de gobernación por no participar de las aspiraciones del gobernador tucumano Bernabé Aráoz.
2. Por ejemplo la nota del Cabildo de Santiago al director Alvarez Thomas, 6 de mayo de 1815, citada en Alfredo Gargaro, “Santiago del Estero, 1810-1862", en Historia de la Nación Argentina, tomo 9, Separata, 1941, pp. 7-8.
3. Ibid., pp. 23-28.
4. Alfredo Gargaro cita por ejemplo una carta remitida por Gabino Ibáñez al gobernador intendente de Córdoba haciendo referencia al movimiento encabezado por Borges y que lo obligara a deponer su cargo de teniente de gobernador de Santiago. Ibáñez expresaba:
(...) En el día se halla Borges con sus socios en el punto de Sabagasta, campaña de esta jurisdicción reuniendo gentes y según estoy informado ya tiene como diez compañias o mas, hechando voses de que va de acuerdo con Artigas y Güemes, que no han de obedecer a las autoridades ni al Congreso, ni al General, que no pagarán las contribuciones impuestas y que formaran la montonera (...)
Carta fechada en Santiago, 20 de diciembre de 1816, y citada en A. Gargaro, “Los orígenes de la autonomía...”, pp. 63-64.
5. Armando Raúl Bazán, Historia del Noroeste argentino, Buenos Aires, Plus Ultra, 1986, pp. 228-229.
6. Oficio fechado en la Sala Capitular el 7 de abril de 1820, Alfredo Gargaro, “Santiago del Estero y el federalismo argentino”, en Tres Conferencias Históricas, Santiago del Estero, 1939, pp. 70-71.

Fuente
http://www.ucema.edu.ar/

Imagen
http://www.santiagodelestero.org/museos-santiago.php

Observa tus pensamientos




Observa tus pensamientos,

se convertirán en tus palabras.


Observa tus palabras,

se convertirán en tus acciones.


Observa tus acciones,

se convertirán en tus hábitos.


Observa tus hábitos,

se convertirán en tu carácter.


Observa tu carácter,

se convertirá en tu destino.


Mohandas Karamchand Gandhi

Imagen
arismartin2.com

MIL GRULLAS POR JAPÓN


SADAKO SASAKI
7 de enero de 1943 – 25 de octubre de 1955

Sadako Sasaki fue una joven que vivió cerca del puente Misasa en Hiroshima (Japón).

El 6 de agosto de 1945 sólo tenía dos años cuando Estados Unidos hizo estallar dos bombas atómicas sobre la población civil. En el momento de la explosión estaba en su casa, que se encontraba a 1,5 km de la zona cero de la deflagración. Nueve años después, Sadako era una niña fuerte, atlética y con mucha energía. Mientras corría una carrera, empezó a sentirse mal y cayó al suelo. Le fue diagnosticada leucemia, conocida como «enfermedad de la bomba A».

Su mejor amiga, Chizuko Hamamoto, le recordó una vieja tradición sobre alguien que realizó mil grullas en forma de figuras de papel (origami) y gracias a ello los dioses le concedieron un deseo. Con sus propias manos, Chizuko le regaló la primera grulla que realizó en papel dorado y le dijo: «Aquí tienes tu primera grulla». Sadako tenía la esperanza de que los dioses le concedieran el deseo de volver a correr de nuevo. Al poco tiempo de empezar su tarea conoció a un niño que le quedaba muy poco tiempo de vida por la misma causa, la leucemia, le animó a que hiciera lo mismo que ella con las grullas pero el niño respondió: «Sé que moriré esta noche».

Sadako pensó que no sería justo pedir la curación sólo para ella, y pidió que el esfuerzo que iba a hacer sirviera para traer la paz y la curación a todas las víctimas del mundo.

Con el papel de los botes medicinales y otros que iba encontrando llegó a completar 644 grullas de papel. El avance de la enfermedad impidió que acabase de realizar la tarea, muriendo el 25 de octubre de 1955 (a los 12 años de edad) tras 14 meses de ingreso en el hospital. Sus compañeros de escuela, después de su fallecimiento, llegaron a completar el número, aportando las grullas que faltaron por hacer hasta 1.000.

Los compañeros de escuela y amistades pensaron dedicarle un monumento donde se representaría a Sadako sosteniendo una grulla dorada en su mano, también dedicada a todos los niños que murieron a causa de las dos bombas atómicas.

Y por fin, en el Parque de la Paz de Hiroshima fue construida la estatua dedicada a Sadako en 1958, en la base está escrito «Este es nuestro grito, esta es nuestra plegaria: paz en el mundo». La historia fue tan impactante que trascendió los límites de Japón, convirtiéndose en un referente mundial de los movimientos pacifistas.


Fuente

De Wikipedia, la enciclopedia libre

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myhero.com

Visita: http://las1000grullas.wordpress.com/


PADILLA MANUEL ASCENCIO

Manuel Ascensio Padilla (1773-1816)
Alineación al centro
Manuel Ascencio Padilla (o Manuel Ascensio Padilla) (Chipirina, Chayanta, Bolivia, 26 de septiembre de 1774 – La Laguna, actualmente Padilla, Bolivia, septiembre de 1816), militar altoperuano que luchó en las guerras de independencia de su país al frente de guerrillas irregulares, y que murió en defensa de su patria.

Era el hijo de un hacendado local y vivió en el campo casi toda su juventud. Se enroló en el ejército siendo muy joven, participando en la represión y ajusticiamiento de Dámaso Catari, sucesor de Túpac Amaru en el La Paz

Estudió derecho en la Universidad de Charcas, pero abandonó sus estudios para casarse con Juana Azurduy en 1805.

Al estallar la revolución del 25 de mayo de 1809 en Chuquisaca, se unió a la misma; tras ser derrotada, huyó a ocultarse en las aldeas de indios de la sierra.

En septiembre de 1810, la ciudad de Cochabamba se plegó a la Revolución de Mayo y reconoció a la Primera Junta de Buenos Aires.

Padilla fue nombrado comandante civil y militar de una amplia zona intermedia entre Chuquisaca, Cochabamba y Santa Cruz de la Sierra, con centro en La Laguna. Desde allí apoyó con sus 2000 guerrilleros indios la campaña de Esteban Arce, que logró la victoria de Aroma.

Alojó en sus haciendas al Ejército del Norte y apoyó la política de sus jefes, especialmente de Juan José Castelli. Después de la batalla de Huaqui, sus bienes fueron incautados y su esposa cayó presa. Padilla logró rescatarla, por lo que pasó con sus hijos al campamento móvil de su esposo. El general vencedor, José Manuel de Goyeneche, ofreció a Padilla un empleo público y el indulto para que se pasase a los realistas, pero se negó.

Si bien logró una victoria en el pueblo de Pintatora, luego fue derrotado en Tacobamba. Se retiró hacia el sur y se unió al éxodo jujeño, a órdenes de Manuel Belgrano. Participó de las batallas de Tucumán y Salta.

Regresó al Alto Perú a mediados de 1813 y logró reunir un enorme contingente de casi diez mil hombres. Este grupo de indígenas rebeldes fue llamado por Bartolomé Mitre la Republiqueta de La Laguna.

Sin embargo, Belgrano los utilizó como guías y como transporte de cañones a través de las montañas. Aún después de su primera derrota, sólo aceptó la colaboración marginal del batallón de “Leales”, bajo el mando de Juana Azurduy, en la batalla de Ayohuma. Reconociendo su error, posteriormente el general la condecoró regalándole su espada.

Mientras el Ejército se retiraba, los Padilla comenzaban una eficaz guerra de guerrillas contra los realistas, en la zona de Mojotoro, Yamparáez, Tarabuco, Tomina y La Laguna. Esta última villa se llama actualmente "Padilla" y un pueblo vecino, "Azurduy". Otros jefes, como Ignacio Warnes, Juan Antonio Álvarez de Arenales y Vicente Camargo, organizaron también guerrillas de resistencia.

Tras varias semanas de lucha, los realistas secuestraron a los cuatro hijos de los Padilla y mataron a los dos varones. A continuación usaron a las niñas como señuelo para atrapar al caudillo. La respuesta de Padilla y su esposa, seguidos por algunos soldados, fue atacar furiosa y ciegamente a sus enemigos, consiguiendo matarlos y rescatar a las niñas, pese a que murieron días más tarde. A partir de ese momento, se convirtió en uno de los caudillos más violentos del Alto Perú, lo que lo llevó incluso a enfrentamientos con caudillos como Umaña.

Durante la tercera expedición al Alto Perú, tomó la ciudad de Chuquisaca, pero el general Rondeau nombró gobernador de la misma a Martín Rodríguez. Como Belgrano, Rondeau se negó a emplear la ayuda ofrecida por Padilla. Pero cuando fue derrotado en la batalla de Sipe-Sipe, le ordenó cubrir su retirada y sostenerse en Chuquisaca.

"Estaré de regreso sin que pase mucho tiempo"

En una enérgica y conocida carta de respuesta a Rondeau, Padilla respondió:

"Lo haré como he acostumbrado hacerlo en más de 5 años por amor a la Independencia...el enemigo no tendrá un solo momento de quietud"

Pero también reprochaba violentamente el desprecio con que el Ejército había tratado a los altoperuanos, privándolos de armas y soldados. Padilla cumpliría sus promesas hasta la muerte; Rondeau y su ejército no podrían cumplir la suya.

La guerra continuó sin cuartel, pero los patriotas iban siendo vencidos uno a uno: de acuerdo al historiador argentino Bartolomé Mitre, de más de cien caudillos que lucharon contra los realistas, al final de la guerra sólo quedaban 9 con vida. En mayo de 1816 caía el coronel Camargo en Cinti, y fue de inmediato degollado; la villa de Cinti se llama actualmente en su honor Camargo.

Tras una serie de batallas menores, rodeadas por un enorme número de enemigos, las fuerzas de Padilla fueron vencidas en la batalla de La Laguna. El vencedor, coronel Aguilera, ordenó matar a los prisioneros, entre ellos Padilla. Su cabeza fue expuesta en la punta de una lanza en la plaza de La Laguna.

El general Belgrano lo nombró coronel, sin saber que ya había muerto. Al enterarse, nombró teniente coronel a Juana Azurduy, que intentaba seguir sin su marido. Pero también Juana debió retirarse hacia el sur, refugiándose en Salta. Regresó a Chuquisaca en 1825, después de la derrota final realista, donde a fines de ese año la visitaron Simón Bolívar y Antonio José de Sucre. Moriría el 25 de mayo de 1863, acompañada por su única hija sobreviviente.




Quilapayún - Manuel Ascencio Padilla

Manuel Ascencio Padilla

Letra
Sergio Ortega

Manuel Ascencio Padilla,
Padilla Ascencio Manuel
no habrá ninguno como él
su valor ¡qué maravilla!
Empujao' por la guerrilla
salió dispuesto a vencer
pero le ha de acontecer
que en una mala acechanza
no perdiendo la esperanza
la vida la ha de perder.

Juana se hubo de llamar
la mujer de aquel valiente
caramba, que limpiamente
llegó dispuesta a luchar.
Una fiera al atacar
sin dar ni pedir clemencia'
Señor mío, qué conciencia,
qué claridad, qué razones
conquistando corazones
luchó por la independencia.

Empujados a luchar
se entregan al pensamiento
de que al fin un alzamiento
habrá de tener lugar.
Ya dispuestos a tomar
el corbo y la carabina
las pampas de la Argentina
del godo van a librar.
En qué habrá de terminar
la muerte ya lo adivina.

Uno puede asegurar
que no es de hombre el ir llorando
¿a qué seguirse aguantando
las ganas de protestar?
ahura para rematar,
ahura mando, ahura sentencio:
no han de quedar en silencio
los que han sabido luchar
yo prometo continuar
por Juana y Manuel Ascencio.


Fuente
http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Ascencio_Padilla
http://www.cancioneros.com/nc/

Imagen
es.wikipedia.org

http://compartiendoculturas.blogspot.com/2010/03/tupac-amaru.html
http://compartiendoculturas.blogspot.com/2010/09/la-flor-del-alto-peru.htm
http://compartiendoculturas.blogspot.com/2010/09/nuestra-senora-de-la-merced.html


http://www.youtube.com/watch?v=PfD2RiSxuh0



BATALLA DE CASEROS

Batalla de Caseros – 3 de Febrero de 1852

El 21 de noviembre de 1851 se firmó en Montevideo el tratado de alianza entre el imperio del Brasil, Entre Ríos (con Corrientes como agregada) y el Estado Oriental, para llevar la guerra contra la Confederación, bajo la máscara de una cruzada contra el “dictador argentino”.

Conviene recordar las cláusulas de este tratado, cuya mención suele omitirse por explicables escrúpulos.

Después de fundar su acuerdo en declaraciones y los preparativos bélicos del gobernador de Buenos Aires, los firmantes declaraban solemnemente no llevar la guerra a la Confederación sino a su gobierno y convenían luego la forma de la colaboración. La iniciativa de la guerra se atribuía a los estados de Entre Ríos y Corrientes, reservándose el Brasil y la Banda Oriental el papel de “meros auxiliares”. Además del aporte militar, ya mencionado, el Brasil se comprometía a financiar la campaña, mediante la entrega de cien mil patacones mensuales, al seis por ciento de interés, durante el término de cuatro meses, más todo el material de guerra que le fuese solicitado y que se consideraría como empréstito adicional. Urquiza debía hacer reconocer esa deuda, en efectivo y armamentos, por el gobierno futuro de la Confederación; mientras tanto, ella quedaba a cargo de Entre Ríos y Corrientes, las cuales daban “desde ya” en hipoteca, como garantía de su pago, todas sus rentas y territorios de propiedad fiscal. Por el artículo VIII se establecía que el Ejército Imperial permanecería (sin fijar término) ocupando la Banda Oriental, para responder a cualquier requisición de Urquiza; pero se agregaba expresamente que podría trasladarse al teatro de la guerra por su propia decisión, aunque dicha requisición no se produjese: es decir, que se le dejaba la puerta abierta. Por el artículo IV se ratificaba el compromiso de conceder la libre navegación de los ríos y por el XX volvía a reconocerse la independencia del Paraguay. Se trataba, como se ve, de un convenio leonino, con todas la ventajas para el empresario.

A cambio de la ayuda extranjera para su empresa interna, Urquiza renunciaba a derechos inherentes a nuestra soberanía y precipitaba la desintegración de la patria. Brasil ganaba el territorio paraguayo librado a su influjo, la ocupación sine die del Uruguay, el libre acceso por nuestra vías fluviales a su provincia del Mato Grosso y un derecho real de hipoteca como acreedor privilegiado sobre todos los recursos de dos provincias argentinas.

Mucho más, por cierto, y con un riesgo mínimo, de lo que hubiese podido esperar de una guerra victoriosa.

Ese tratado debía permanecer, por supuesto, secreto (art. XXI), para evitar la oleada de indignación que habría provocado su publicación anticipada, poniendo en peligro el éxito de los confabulados.

Inicio de las operaciones

Urquiza inició enseguida sus operaciones. Después de concentrar sus fuerzas en Gualeguaychú, se movió hacia el Paraná y lo cruzó, sin encontrar la resistencia que esperaba por el lado de Santa Fé. El gobernador de esta provincia, general Echagüe, en efecto, al no recibir los refuerzos que había solicitado, resolvió batirse en retirada para unirse al grueso del ejército de Rosas. Casi sin obstáculos, Urquiza pudo proseguir su marcha sobre Buenos Aires y llegar al Arroyo del Medio a mediados de enero. En San Lorenzo le había desertado en masa, matando a su jefe, la división de Aquino, fuerte de 600 hombres, para pasarse al ejército de Rosas.

Salvo una escaramuza, en los campos de Alvarez, con un destacamento de las fuerzas del coronel Lagos, jefe del departamento del norte, el ejército aliado pudo conseguir sin inconvenientes su camino sobre la capital. Se había impuesto, en los consejos de guerra de Rosas, la táctica de concentrar todas las fuerzas en el campamento de Santos Lugares para resolver la contienda con una batalla decisiva.

Con todo ello, no se había presentado en el campamento de Urquiza ni un solo hombre de Buenos Aires, mientras que de aquél desertaban continuamente muchos para incorporarse al del Restaurador. Las “Memorias” del general César Díaz –jefe de la división oriental del ejército aliado- nos dan un preciso testimonio del estado de poblaciones. Parece que el mismo Urquiza se impresionó por la frialdad con que lo recibieron en Pergamino y en Luján y manifestó dudas sobre la legitimidad y la oportunidad de la empresa en que se había lanzado, aunque tratando de cohonestarla con el pretexto de la “organización nacional”. La popularidad de Rosas –afirma el autor- “era tan grande o tal vez mayor de lo que había sido diez años antes”. Todavía en la víspera de la batalla –el 1º de febrero- 400 hombres más abandonaron el ejército aliado para plegarse al de Santos Lugares.

Hay un problema de Caseros que sigue sin solución y es el referente a las relaciones de Rosas con el general Pacheco, que por su prestigio militar y su cargo en el comando de Santos Lugares, era el jefe indicado para organizar la batalla decisiva. No obstante ello, renunció en las vísperas, fundándose en el hecho de haber asumido Rosas personalmente la dirección de la campaña.

¿Desconfió Rosas de Pacheco? ¿Hubo motivos para tal desconfianza? Parece seguro que aquél desaprobó una maniobra de su subordinado, al abandonar la defensa de Puente Márquez, en lugar de hacerse fuerte allí; y es posible que, en las circunstancias en que se encontraba, haya atribuido esa retirada a un súbito enfriamiento de la fe o a un debilitamiento de la voluntad. Se explica así su decisión de asumir personalmente el comando. Como también se explica la reacción de Pacheco, que fue natural en un hombre de honor al sentirse sospechado: tanto más valiosa cuanto que arrostraba con ella el disgusto del Restaurador, en momentos decisivos fue, con todo, una más en el cúmulo de circunstancias desgraciadas que decidieran la caída de Rosas y el fin de la Confederación. ¿Habría sido otro el resultado de la batalla, de haber comandado Pacheco las fuerzas argentinas? Sólo Dios lo sabe.

A fines de enero, las tropas aliadas se encontraban ya a la vista de Buenos Aires, defendida por su ejército veterano. Rosas convocó a un junta de guerra en la noche del 2 de febrero, a la que concurrieron el general Pinedo y los coroneles Chilavert, Díaz, Lagos, Costa, Sosa, Bustos, Hernández, Cortina y Maza. Se decidió dar la batalla al día siguiente. El ejército de Urquiza estaba constituido por los contingentes del litoral, al que se había sumado la flaca pero activa legión de los emigrados; por la división oriental, en la que pululaban los extranjeros, y por la brasileña, animada del odio atávico y ansiosa de lavar la humillación de Ituzaingó. En la función de boletinero del ejército y vestido con un raro uniforme de coronel francés, venía el ya celebre polemista don Domingo Faustino Sarmiento. En la artillería, un joven coronel que hacía versos malos y se llamaba Bartolomé Mitre. Ambos futuros presidentes de la República habían allegado a Gualeguaychú en un barco de guerra brasileño y habían sido presentados y recomendados por el comandante brasileño al general Urquiza. Las fuerzas aliadas alcanzaban a 24.000 hombres.

El ejército de la Confederación, animado por la voluntad de defender una vez más el honor y la integridad de la patria contra la agresión extranjera y sus cómplices, alcanzaba a 22.000 hombres -12.000 de caballería y el resto infantería— pero muchos eran bisoños, sin ninguna experiencia de guerra. Sus 60 cañones viejos casi no tenían munición.

El choque se produjo el 3 de febrero en las inmediaciones del Palomar de Caseros. La batalla comenzó a las nueve de la mañana y terminó al comenzar la tarde. Rosas, herido en una mano de un balazo, se alejó acompañado de un auxiliar. Bajó un ombú situado en Hueco de los Sauces (actual Plaza Garay) redactó su renuncia que encomendó a su ayudante, quien inmediatamente la hizo llegar a la Junta de Representantes. Luego, cubierto por un poncho, durmió —llevaba tres noches en vela— una hora. A las cuatro de la tarde llega a la embajada inglesa; esa misma noche, con el auxilio de Manuelita, el embajador inglés Gore lo convence de la necesidad de refugiarse en el buque de guerra Centaur, anclado en la rada. Rosas lo hace finalmente y junto con algunos miembros de su gobierno navega, días después, hacia el exilio en la nación que él mismo, años atrás, obligara a agachar su altivez imperial ante la denodada defensa de la soberanía argentina.

El 20 de febrero las tropas vencedoras de Urquiza, Caxias y Márquez de Souza entraron en Buenos Aires y desfilaron por sus calles.

Llevaría mucho espacio analizar el trasfondo y las circunstancias en que se desarrolla la traición de Urquiza, no a Rosas sino a la Patria. Pero si tratásemos de adoptar una actitud pragmática, podríamos echar un vistazo a las consecuencias de Caseros y determinar así las “bondades” de la actitud del general en jefe pasado al enemigo que debía enfrentar.

Consecuencias de la Batalla de Caseros

1) Pérdida definitiva de la Misiones Orientales (territorio de igual superficie que la provincia de Entre Ríos), que correspondía por derecho a la Argentina y se cedió con motivo de los pactos firmados por Urquiza al entrar en alianza con los brasileños.

2) Ridícula renuncia a la soberanía sobre nuestros ríos interiores, regalando vilmente lo que se había conseguido luego de tantos años de bloqueo y sangre argentina derramada. Esto se realiza a través de la sanción de la Constitución Nacional y bajo el influjo del pensamiento alberdiano de que había que abrir nuestros ríos a la “civilización” (conceptos inexistentes en todo otro lugar de la tierra).

3) Derogación de la Ley de Aduanas (primer acto de gobierno de la administración que sucede a Rosas). Esto significó la ruina de la naciente industria nacional y la entrega de nuestro mercado interno al poder económico predominantemente inglés. A partir de allí recorreremos un acelerado camino hacia un sombrío destino de colonia económica británica.

4) Endeudamiento externo a favor del Brasil, ya que después de Caseros se reconoce como deuda de la Confederación (es lo que Urquiza había firmado con el Imperio) los fondos facilitados para financiar la campaña contra Rosas.

5) Abandono de la firme política exterior llevada adelante por Don Juan Manuel, conocida como “Sistema Americano”, es decir la unidad de las naciones americanas para enfrentar la prepotencia de los países europeos, puesta en practica en forma triunfante durante los bloqueos sufridos por la Confederación.

6) Transformación de la antes altiva Confederación en un mero apéndice de la diplomacia anglo brasileña, provocando primero el abandono a su suerte de la hermana república del Uruguay que caerá bajo la total dependencia político económica del Imperio esclavista. Trama completada casi una década después con la completa destrucción del Paraguay, último freno a la voracidad territorial del Brasil. Destrucción a la cual no solo no nos opusimos, como debimos oponernos por lasos de histórica hermandad en la lucha contra el enemigo histórico, sino que participamos del crimen al ser parte de la alianza que arrasó la tierra guaraní. Nunca mejor puesto el nombre de “Guerra de la Triple Infamia”.

7) Pasar de ser un país antiesclavista (Don Juan Manuel tenía gran ascendiente sobre las comunidades de africanos residentes en Buenos Aires) a ser gendarme del Imperio, al firmarse tratados por los cuales se comprometía a la Confederación a deportar a todo esclavo que se escapara hacia suelo argentino en busca de la libertad que la mismísima Constitución Nacional establecía al abolir para siempre la esclavitud.

¿Puede alguien honesta y seriamente alegar que el resultado de Caseros benefició a la Nación Argentina?

Cada uno tendrá su respuesta, LA VERDAD SIEMPRE ES ÚNICA.


Fuente

Efemérides – Patricios de Vuelta de Obligado

Palacio, Ernesto – Historia de la Argentina 1515/1938

Nuestra Historia Argentina – Tomo 3. Pág. 96 – Editorial Oriente S.A. – Buenos Aires (1981)

Reggi, Ing. Luciano – 3 de Febrero, Derrota Nacional de Caseros y el Cnel. Martiniano Chilavert.



Fuente
www.revisionistas.com.ar


Imagen
www.revisionistas.com.ar

GUACOLDA

He aquí pincelazos de un cuadro imaginario, hecho para contar la historia mítica de Guacolda y Lautaro...


Para algunos historiadores la existencia de Guacolda solamente consta en el poema épico La Araucana, escrito por Alonso de Ercilla (1533-1594), y por eso es probable que sea un personaje creado por el poeta para ejemplificar las características de la mujer mapuche.

Profundamente enamorada de Lautaro, sentimiento que era correspondido, le habría acompañado en sus últimos momentos antes de ser derrotado por Francisco de Villagra.

Cuenta Ercilla que:

"Aquella noche el bárbaro dormía
con la bella Guacolda,
y ella por él no menos se abrasaba".

Según la tradición, Villagra, vencedor, la habría llevado consigo y la mujer habría muerto de pena al poco tiempo.

A pesar de que la existencia de Guacolda pueda ser discutida, ha llegado a formar parte de los elementos que constituyen la identidad nacional.

Una mujer de carne y hueso.

Para los cronistas coloniales, en cambio, se trata de un personaje de carne y hueso y no dudan de su existencia y explican su nombre a partir del mapudungun Wa-kelü, o Wa-koli, (choclo, maíz - colorado, rojo), deduciendo, por ello, que habría sido de cabellera rubia o rojiza.

Para los españoles, su nombre era Teresa y era una mujer hermosa.

Guacolda se habría unido a Lautaro cuando este tomó la ciudad de Concepción.

Fray Diego de Ocaña, la religiosa Imelda Cano, el padre Rosales, y posteriormente Benjamín Vicuña Mackenna, coinciden en describirla como una bella mujer que fue seducida por el valor y el talento de Lautaro y que decidió seguirlo con decisión y coraje.

Las crónicas también señalan que Guacolda y Lautaro sirvieron en casas de españoles. Se dice que Lautaro sirvió al mismo Pedro de Valdivia y que Guacolda se habría criado en la casa de Francisco de Villagra.

Si bien los mapuches tenían un miedo supersticioso a los españoles, pues les atemorizaba tanto su presencia como para considerarlos dioses malignos, se podría inferir que ni Guacolda ni Lautaro les temían: ambos habían vivido en sus casas, los habían visto dormidos, enfermos, quizá borrachos, los habían visto comer, llorar y reír, y hasta habían limpiado sus armas.

Para ambos los españoles no eran dioses sino seres humanos, hombres de la tierra, como ellos y, por lo tanto, susceptibles de ser derrotados.

Cuando Lautaro dio por finalizado su aprendizaje, partió a unirse a la sublevación de su pueblo. Guacolda se le habría unido y ya no se habría separado más.

Guacolda habría estado presente en la toma de Concepción, en la Batalla de Mataquito, (1 de abril de 1557), y en el asalto a Santiago.

También habrían muerto juntos, en una emboscada tendida una noche por Francisco de Villagra.

Alonso de Ercilla y Pedro Mariño de Lobera cuentan, en sus respectivas La Araucana e Historia de Chile, que Guacolda habría predicho a Lautaro el desastre y la muerte en la víspera de la batalla de Chilipirco (batalla de Peteroa, 1557), donde ambos habrían muerto.

Rol de la mujer mapuche

En la sociedad mapuche, la mujer cumplía un rol económico de importancia, al desarrollar en mayor parte las tareas del agro; incluso, antes de formalizarse alguna unión matrimonial, el novio debía recompensar a su futuro suegro con algunos animales. Su vida transcurría entre la crianza de los hijos y las labores económicas; formaba parte de un grupo de varias esposas, que vivían en la misma ruca o vivienda mapuche, junto a sus hijos.

Descripción de González de Néjera

Alonso González de Nájera, autor del Desengaño y Reparo de la Guerra del Reino de Chile, describe a la mujer mapuche así:

"...Aunque en general tienen las mujeres el color más castaño que moreno, tiénenlo muchas veces verdinegro y quebrado, y unas más blanco que otras, según los temples de las tierras donde nacen y se crían... Son comúnmente de mediana estatura, y en general tienen grandes y negros ojos, cejas bien señaladas, pestañas largas y cabello muy cumplido... Su vestir es honesto para bárbaras, pues usan de faldas largas, mostrando sólo los pies descalzos y los brazos desnudos. Sus ejercicios son hilar y tejer lana de que se visten... Tienen a cargo las mujeres la labranza de las tierras, y el hacer los vinos...".

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laspitucasnylon.blogspot.com

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MAHATMA (ALMA GRANDE)

1869.- Nace el político religioso de la India, Mahatma Gandhi, considerado uno de los líderes más respetados del siglo XX, al luchar en forma pacífica por la independencia de su país.
Es asesinado el 30 de enero de 1948.


Sé firme en tus actitudes y perseverante en tu ideal.

Pero sé paciente, no pretendiendo que todo te llegue de inmediato.

Haz tiempo para todo, y todo lo que es tuyo, vendrá a tus manos en el momento oportuno.

Aprende a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamas.

Espera con paciencia a que maduren los frutos para poder apreciar debidamente su dulzura.

No seas esclavo del pasado y los recuerdos tristes.

No revuelvas una herida que está cicatrizada.

No rememores dolores y sufrimientos antiguos.

¡Lo que pasó, pasó!

De ahora en adelante procura construir una vida nueva, dirigida hacia lo alto y camina hacia delante, sin mirar hacia atrás.

Haz como el sol que nace cada día, sin acordarse de la noche que pasó.

Sólo contempla la meta y no veas que tan difícil es alcanzarla.

No te detengas en lo malo que has hecho; camina en lo bueno que puedes hacer.

No te culpes por lo que hiciste, más bien decídete a cambiar.

No trates que otros cambien; sé tú el responsable de tu propia vida y trata de cambiar tú.

Deja que el amor te toque y no te defiendas de él.

Vive cada día, aprovecha el pasado para bien y deja que el futuro llegue a su tiempo.

No sufras por lo que viene, recuerda que “cada día tiene su propio afán”.

Busca a alguien con quien compartir tus luchas hacia la libertad; una persona que te entienda, te apoye y te acompañe en ella.

Si tu felicidad y tu vida dependen de otra persona, despréndete de ella y ámala, sin pedirle nada a cambio.

Aprende a mirarte con amor y respeto, piensa en ti como en algo precioso.

Desparrama en todas partes la alegría que hay dentro de ti.

Que tu alegría sea contagiosa y viva para expulsar la tristeza de todos los que te rodean.

La alegría es un rayo de luz que debe permanecer siempre encendido, iluminando todos nuestros actos y sirviendo de guía a todos los que se acercan a nosotros.

Si en tu interior hay luz y dejas abiertas las ventanas de tu alma, por medio de la alegría, todos los que pasan por la calle en tinieblas, serán iluminados por tu luz.

Trabajo es sinónimo de nobleza.

No desprecies el trabajo que te toca realizar en la vida.

El trabajo ennoblece a aquellos que lo realizan con entusiasmo y amor.

No existen trabajos humildes.

Sólo se distinguen por ser bien o mal realizados.

Da valor a tu trabajo, cumpliéndolo con amor y cariño y así te valorarás a ti mismo.

Dios nos ha creado para realizar un sueño.

Vivamos por él, intentemos alcanzarlo.

Pongamos la vida en ello y si nos damos cuenta que no podemos, quizás entonces necesitemos hacer un alto en el camino y experimentar un cambio radical en nuestras vidas.

Así, con otro aspecto, con otras posibilidades y con la gracia de Dios, lo haremos.

No te des por vencido, piensa que si Dios te ha dado la vida, es porque sabe que tú puedes con ella.

El éxito en la vida no se mide por lo que has logrado, sino por los obstáculos que has tenido que enfrentar en el camino.

Tú y sólo tú escoges la manera en que vas a afectar el corazón de otros y esas decisiones son de lo que se trata la vida.

“Que este día sea el mejor de tu vida".

MAHATMA GHANDI

Imagen
ciudadania-express.com

Paul Cezanne (1839-1906)



Paul Cezanne (1839-1906)
Music and Art series

Cézanne, Paul Cézanne, Paul
Nacionalidad: Francia
Aix-en-Provence 19 de enero de 1839 - Aix-en-Provence 22 de octubre de 1906
Pintor
Estilo: Neo-Impresionismo
Obras: 208

Para buena parte de los pintores de la vanguardia, especialmente Matisse y Picasso, Cézanne sería el padre de la modernidad. Este último escribió: "Cézanne era mi sólo y único maestro. No creáis que me limitara a mirar sus cuadros ... Pasé años estudiándolos ... Cézanne era como un padre para todos nosotros".

Nuestro homenaje a Paul Cézanne en su 172º cumpleaños.

María Elena Walsh - El Reino del Revés



El Reino del Revés

Letra María Elena Walsh

Me dijeron que en el reino del revés
nada el pájaro y vuela el pez
que los gatos no hacen miau y dicen yes
porque estudian mucho inglés.

[Estribillo]

Vamos a ver como es el reino del revés
vamos a ver como es el reino del revés

Me dijeron que en el reino del revés
nadie baila con los pies
que un ladrón es vigilante y otro es juez
y que uno y dos son tres.

[Estribillo]

Me dijeron que en el reino del revés
cabe un oso en una nuez
que usan barbas y bigotes los bebés
y que un año dura un mes.

[Estribillo]

Me dijeron que en el reino del revés
hay un perro pequinés
que se cae para arriba y una vez
no pudo bajar después.

[Estribillo]

Me dijeron que en el reino del revés
un señor llamado Andrés
tiene 1.530 chimpancés
que si miras no los ves.

[Estribillo]

Me dijeron que en el reino del revés
una araña y un ciempiés
van montados al palacio del marqués
en caballos de ajedrez.

[Estribillo]

El Reino del Revés Maria Elena Walsh

Nuestro tributo a una desafiadora de las limitaciones, compositora, escritora, amiga de los niños, autora, intérprete, nació un 1 de febrero de 1930 en Ramos Mejía, Provincia de Buenos Aires, hoy 10 de Enero de 2011 pasó a acompañarnos a todos los que seguimos teniendo un corazón de niños.

Reseña extraída de Página/12

La artista María Elena Walsh falleció "luego de una prolongada internación y como epílogo de padecimientos crónicos que la aquejaban", según indica el parte emitido desde la Dirección Médica del Sanatorio de la Trinidad.

Los restos de esta figura de la cultura argentina serán velados entre las 17 y las 24 en Lavalle 1547, sede de la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (Sadaic), y serán inhumados mañana desde las 11 en el Panteón que la entidad posee en el Cementerio de la Chacarita.

Nacida en Ramos Mejía en 1930, Walsh publicó su primer poema a los 15 años y su primer libro, "Otoño Imperdonable", con 17. Escribió más de 40 libros infantiles y compuso temas que fueron interpretados por algunos de los más populares cantantes iberoamericanos, como Mercedes Sosa o Joan Manuel Serrat.

En la década del '50 se exilió en París con su compatriota Leda Valladares, con quien formó el dúo "Leda y María" y grabó el disco "Le Chant du Monde" ("El canto del mundo"). Durante sus cuatro años en la capital francesa, comenzó a escribir poemas y cuentos para niños, un trabajo que la convirtió en una reconocida figura de las letras infantiles en América Latina.

Entre las décadas de 1960 y 1970 publicó el grueso de su producción infantil, como "El reino del revés" (1965), "Cuentopos de Gulubú" (1966) y "Versos tradicionales para cebollitas" (1967), "Pocopán" (1977), "Manuelita ¿Dónde vas?" (1997) y "Canciones para Mirar" (2000).

En 1985 fue nombrada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires y, en 1990, Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Córdoba y Personalidad Ilustre de la Provincia de Buenos Aires. En 1991 fue galardonada con el Highly Commended del Premio Hans Christian Andersen de la IBBY (International Board on Books for Young People).

NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE

Juan Pablo II y Nuestra Señora de Guadalupe


ORACIÓN DE JUAN PABLO II

¡Oh Virgen Inmaculada, Madre del verdadero Dios y Madre de la Iglesia!

Tú, que desde este lugar manifiestas tu clemencia y tu compasión a todos los que solicitan tu amparo; escucha la oración que con filial confianza te dirigimos y preséntala ante tu Hijo Jesús, único Redentor nuestro.

Madre de misericordia, Maestra del sacrificio escondido y silencioso, a ti, que sales al encuentro de nosotros, los pecadores, te consagramos en este día todo nuestro ser y todo nuestro amor.

Te consagramos también nuestra vida, nuestros trabajos, nuestras alegrías, nuestras enfermedades y nuestros dolores.

Da la paz, la justicia y la prosperidad a nuestros pueblos; ya que todo lo que tenemos y somos lo ponemos bajo tu cuidado, Señora y Madre nuestra.

Queremos ser totalmente tuyos y recorrer contigo el camino de una plena felicidad a Jesucristo en su Iglesia: no nos sueltes de tu mano amorosa. Virgen de Guadalupe, Madre de las Américas, te pedimos por todos los Obispos, para que conduzcan a los fieles por senderos de intensa vida cristiana, de amor y de humilde servicio a Dios y a las almas.

Contempla esta inmensa mies, e intercede para que el Señor infunda hambre de santidad en todo el Pueblo de Dios, y otorgue abundantes vocaciones de sacerdotes y religiosos, fuertes en la fe, y celosos dispensadores de los misterios de Dios.

Concede a nuestros hogares la gracia de amar y de respetar la vida que comienza, con el mismo amor con el que concebiste en tu seno la vida del Hijo de Dios. Virgen Santa María, Madre del Amor Hermoso, protege a nuestras familias, para que estén siempre muy unidas, y bendice la educación de nuestros hijos.

Esperanza nuestra, míranos con compasión, enséñanos a ir continuamente a Jesús y, si caemos, ayúdanos a levantarnos, a volver a Él, mediante la confesión de nuestras culpas y pecados en el Sacramento de la Penitencia, que trae sosiego al alma. Te suplicamos que nos concedas un amor muy grande a todos los santos Sacramentos, que son como las huellas que tu Hijo nos dejó en la tierra. Así, Madre Santísima, con la paz de Dios en la conciencia, con nuestros corazones libres de mal y de odios podremos llevar a todos la verdadera alegría y la verdadera paz, que vienen de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que con Dios Padre y con el Espíritu Santo vive y reina por los siglos de los siglos, Amén.


http://compartiendoculturas.blogspot.com/2010/12/juan-diego.html

JUAN DIEGO




Después de la conquista espiritual que se inició en la Conquista y continuó en la Colonia, aparecieron pronto las primeras familias indígenas cristianas en las cercanías de la ciudad de la Nueva España. Juan Diego pertenecía a una de estas familias y nació en Tolpetlac, aldea al norte de la Villa de Guadalupe en 1548.

Su nombre indígena era Cuauhtlatóhuac, "el que habla como águila". Su oficio era la manufactura de petates que vendía en Tlatelolco.

Según la leyenda, a los 53 años de edad tuvo la aparición milagrosa que daría inicio a la adoración de la Virgen de Guadalupe en México.

La historia fue así: Juan Diego vivía con su mujer y su tío Juan Bernardino en Tulpetac, lugar donde no había iglesias por lo cual tenían que ir a misa hasta Santa Cruz de Tlatelolco.

El sábado 9 de diciembre de 1531 Juan Diego se encaminaba hacia ahí y al pasar por el cerro del Tepeyac oyó un canto que no era de esta tierra. Se detuvo a gozar de él y cuando miró arriba vio un sol resplandeciente y en medio a una señora en actitud de oración, él fue a saludarla y ella le dijo que era su deseo que le labrase un templo en ese llano y le encomendó también que le comunicara ese deseo al señor obispo.

El obispo no lo tomó en serio y le pidió que volviese otra vez al lugar a ver si sus ojos no lo habían traicionado. Regresó desconsolado Juan Diego y la Santísima Virgen se le apareció otra vez para decirle que volviera el domingo a ver al señor obispo.

Así lo hizo Juan Diego, pero el obispo le pidió una señal comprobatoria de la voluntad de la Virgen.

La señora se le apareció de nuevo y le pidió que volviera al día siguiente.

El lunes, día de la cita, se enfermó de cuidado el tío Juan Bernardino y recién el martes pudo salir Juan Diego que se dirigió la ciudad a buscar a un sacerdote para que le administrara los últimos sacramentos.

Iba por ahí, ese día 12 de diciembre, cuando al pasar de nuevo por el Tepeyac se le volvió a parecer la Virgen y le preguntó qué le pasaba.

El le contó lo de la enfermedad de su tío y ella le dijo que no se preocupara porque su tío ya estaba sano, después le pidió que subiera al cerro a recoger unas flores.

Fue Juan Diego y en efecto encontró muy bellas rosas de las que no era temporada y que nunca se habían dado allí. Ya con ellas en su ayate, la Santísima Virgen dijo que las llevara donde el señor obispo pero que no desplegase su ayate ni lo mostrara a nadie más. Así lo hizo Juan Diego.

Después de conseguir entrar en el obispado, le dijo a Zumárraga, el obispo, que ahí le llevaba la prueba que le había pedido. En ese momento soltó su ayate y apareció en él pintada como por los ángeles, la imagen de la Virgen de Guadalupe.

Juan Diego ha sido propuesto como santo a la iglesia católica y durante mucho tiempo su templo fue venerado por los indígenas.

La leyenda al pie de la estatua con su imagen que se encuentra en la plaza de la Basílica dice lo siguiente: "Personificación de nuestro pueblo, a quien la excelsa Madre de Dios tituló: hijo predilecto de su corazón y le mandó pedir al obispo un templo donde mostrar su misericordia. Al entregar las flores recibidas como señal, apareció estampada en su tilma la maravillosa imagen de la Virgen de Guadalupe, el 12 de diciembre de 1531, añometlactli omey actal, 13 caña, fecha inmortal para todos los mexicanos."

Nota:

Petate: La palabra petate se utiliza en América Central y México para referirse a un tipo de alfombra tejida, y cuyo nombre proviene del vocablo náhuatl petatl. El petate se elabora a base de fibras de la planta llamada Palma de Petate Thrinax Morrissi. La RAE lo define como estera. Generalmente son tejidos en forma rectangular y pueden encontrarse en diferentes tamaños.

Ayate: En México, el ayate era una como capa o cobija con la que se cubrían en tiempo de frío y era hecha de algodón o de fibras vegetales trenzadas artesanalmente.

Imagen: mensajerosdemaria.blogspot.com

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SAN NICOLÁS DE BARI




Origen de la figura de Papá Noel o Santa Claus.

Patrono de Rusia, de Grecia y de Turquía
.



San Nicolás de Mira (o Myra) o San Nicolás de Bari, obispo de Mira, en Licia, famoso por su santidad y por su intercesión ante el trono de la divina gracia (s. IV).

Este santo fue tan popular en la antigüedad, que se le han consagrado en el mundo más de dos mil templos. Era invocado en los peligros, en los naufragios, en los incendios y cuando la situación económica se ponía difícil, y la gente conseguía por su intercesión favores admirables.

Por haber sido tan amigo de la niñez, en su fiesta se reparten dulces y regalos a los niños, y prácticamente con esta fecha se empezaban las festividades de diciembre. Como en alemán se llama "San Nikolaus", lo empezaron a llamar Santa Claus, y lo pintan como un anciano vestido de rojo, con una barba muy blanca, que pasaba de casa en casa repartiendo regalos y dulces a los niños (entre nosotros lo llamaron Papá Noel).

De San Nicolás escribieron muy hermosamente San Juan Crisóstomo y otros grandes santos. Su biografía la escribió San Metodio, Arzobispo de Constantinopla, y de ella sacamos los siguientes datos curiosos.

Nació en Licia, Turquía, de padres muy ricos. Desde niño se caracterizó porque todo lo que conseguía lo repartía entre los pobres. Decía a sus padres: "sería un pecado no repartir mucho, siendo que Dios nos ha dado tanto".

Tenía un tío que era obispo y este lo consagró como sacerdote. Al morir sus padres atendiendo a los enfermos en una epidemia, él quedó heredero de una inmensa fortuna. Entonces repartió sus riquezas entre los pobres y se fue de monje a un monasterio.

Después quiso visitar la Tierra Santa donde vivió y murió Jesús, y al volver de allá llegó a la ciudad de Mira (en Turquía) donde los obispos y sacerdotes estaban en el templo discutiendo a quién deberían elegir como nuevo obispo de la ciudad, porque el anterior se había muerto.

Al fin dijeron: "elegiremos al próximo sacerdote que entre al templo". Y en ese momento sin saber esto, entró Nicolás y por aclamación de todos fue elegido obispo. Por eso se le llama San Nicolás de Mira.

La especialidad de este santo fueron los milagros tan numerosos que logró conseguir de Dios. Lo pintaban con unos niños, porque los antiguos contaban que un criminal hirió a cuchillo a varios niñitos, y el santo al rezar por ellos obtuvo su curación instantánea. También pintan junto a él a una señorita, porque en su ciudad había un anciano muy pobre con tres hijas y no lograba que se casaran por ser en tan extremo pobres. Entonces el santo por tres días seguidos, cada noche le echó por la ventana una bolsa con monedas de oro, y así el anciano logró casar a sus hijas muy bien.

Es Patrono de los marineros, porque estando unos marineros en medio de una terribilísima tempestad en alta mar, empezaron a decir: "Oh Dios, por las oraciones de nuestro buen Obispo Nicolás, sálvanos". Y en ese momento vieron aparecer sobre el barco a San Nicolás, el cual bendijo al mar, que se calmó, y en seguida desapareció.

Otro día iban a condenar injustamente a tres amigos suyos que estaban muy lejos. Ellos rezaron pidiendo a Dios que por la intercesión de Nicolás su obispo los protegiera. Y esa noche en sueños el santo se apareció al juez y le dijo que no podía condenar a esos tres inocentes. Y fueron absueltos.

El emperador Licino decretó una persecución contra los cristianos y Nicolás fue encarcelado y azotado, pero siguió aprovechando toda ocasión que se le presentaba, para enseñar la religión a cuantos trataban con él. Más tarde llegó el emperador Constantino y lo liberó a él junto con todos los demás prisioneros cristianos.

Luego apareció la herejía de Arrio que decía que Jesucristo no es Dios. San Nicolás se opuso con toda su sabiduría y con su gran ascendiente y no permitió que los arrianos entraran a su ciudad de Mira.

Dicen que el santo murió el 6 de diciembre del año 345.

En oriente lo llaman Nicolás de Mira, por la ciudad donde estuvo de obispo, pero en occidente se le llama Nicolás de Bari, porque cuando los mahometanos invadieron a Turquía, un grupo de católicos sacó de allí en secreto las reliquias del santo y se las llevó a la ciudad de Bari, en Italia. En esa ciudad se obtuvieron tan admirables milagros al rezarle a este gran santo, que su culto llegó a ser sumamente popular en toda Europa. Es Patrono de Rusia, de Grecia y de Turquía. En Roma ya en el año 550 le habían construido un templo en su honor.

Nota:
Nicolás significa Protector y defensor de pueblos.


Fuente
http://www.santopedia.com/santos/san-nicolas-de-bari/

http://compartiendoculturas.blogspot.com/2009/12/leyenda-de-las-tres-doncellas.html

Mensaje de Felix Diaz -parte 2 de 4




Conferencia de prensa que ofreció Félix Díaz, representante de la comunidad qom de Formosa, Argentina.

Fuente: http://comunidadlaprimavera.blogspot.com/2009/10/mensaje-de-felix-diaz-parte-2-de-4.html

http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-158101-2010-12-05.html