Hogares en total armonía



Para utilizar los elementos al alcance de todos para hacer mas favorables las energías del planeta, un espacio armónico, saludable y vitalizante se aplica el Feng-Shui, un arte milenario que se crea si se dan varios factores simultáneamente.

Según la licenciada Oriana Muñoz, especializada en esta ciencia china que tiene más de 4000 años de antigüedad, la posición y orientación del espacio es una cuestión muy importante para el flujo de las energías positivas.

Observa que los espacios de las residencias y oficinas y de los muebles y otros objetos que estén en ellos pueden afectar seriamente el modo de vida de las personas que los ocupan.

Señala que en Occidente no existe la costumbre de reparar en esos detalles, ya que los muebles, cortinas, accesorios y plantas son instalados de acuerdo a los gustos de los propietarios y residentes, de la comodidad, de la moda y del presupuesto del cual se disponga, “pero sólo en contadas ocasiones acertamos en su posición exacta para que fluya bien la energía positiva o chi”.

Entre los consejos que da la licenciada Muñoz para la aplicación del Feng Shui en el hogar están los siguientes.

En el hogar

Las casas deben protegerse con árboles y, un elemento esencial en la entrada puede ser la instalación en su lado izquierdo de una fuente o estanque de agua que favorecerá la fortuna.

No deben colocarse muebles muy grandes en la entrada de la vivienda porque perturban la armonía del hogar y dificulten el acceso.

En la sala se debe evitar que los sofás y sillas le den la espalda a la puerta de entrada; se deben colocar unos enfrente de los otros; y evitar también la distribución en “L” de los muebles.

En el dormitorio todo tiene que disponerse alrededor de la cama, cuya cabecera no debe darle la espalda a una ventana ni el frente hacia un baño o un pasillo.

Los colores favorecedores en esta área son el azul, los tonos beige y los claros.

Hay que procurar no tener espejos muy cerca de la cama, lo mejor es que estén ubicados dentro de los armarios; evitar cualquier situación de desorden y exceso de productos o decoración; y prescindir de todo lo que recargue las habitaciones. Las sábanas, cortinas y edredones deben ser de colores planos, neutros y preferiblemente lisos o con mínimos estampados, ya que las rayas y formas geométricas llamativas son elementos agresivos y desestabilizadores.

El baño, cuya puerta e inodoro deben permanecer cerrados, hay que mantenerlo ordenado y perfumado.

Se deben evitar los objetos agudos y afilados como plantas de hojas afiladas, esquinas, mesas cuadradas, vigas, y columnas expuestas, y preferir los objetos redondeados y en espiral para que la energía no se estanque. Pero si tiene una mesa cuadrada o rectangular con puntas coloque sobre ellas objetos redondos que suavicen las formas. Coloque un gran espejo frente a la mesa del comedor de modo que se refleje toda la familia y los alimentos que se van a consumir.

La limpieza y el orden son imprescindibles pues permiten que la energía fluya con libertad.

Edén Valera

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