Ahora que se dispone a tomar unos merecidos días de descanso y diversión junto a la familia, es preciso hacerle una revisión completa al auto a fin de garantizar un viaje seguro, sin riesgos ni contratiempos. Desde un simple desperfecto en el funcionamiento del limpiaparabrisas, una fuga en la manguera del refrigerante hasta la presión incorrecta en los cauchos, cualquier falla puede dejarlo varado a mitad del camino o ser la causa de un accidente de tránsito serio.
En manos de expertos
No tiene que ser un mecánico para hacer algunas revisiones antes de partir. Pero si hay que hacerle alineación y balanceo, cambiar los amortiguadores, afinar el motor, no dude en llevarlo al taller con suficiente antelación al viaje.
Allí también van a cambiar las pastillas o discos de los frenos, revisar el aire acondicionado o incluso hacerle servicio completo.
Cauchos
A simple vista puede observar el estado en que se encuentran.
Hay un límite de seguridad para la profundidad del dibujo de la banda de rodamiento. Si es inferior a 1,6 mm ya no puede garantizar el agarre adecuado al manejar.
También vea si tienen grietas, protuberancias en los laterales o clavos o vidrios incrustados.
Infle los cuatro neumáticos a la presión recomendada, ya que las consecuencias de un reventón o la pérdida de estabilidad del carro a altas velocidades pueden ser fatales. La medición debe hacerse en frío.
Luces
No salga de casa sin haber revisado cómo están alumbrando las altas, las bajas, las traseras, las del freno y de cruce. Son fundamentales para conducir de forma segura, sobre todo si cae la noche o comienza a llover antes de que llegue a su destino. Las luces permiten avisar a los conductores que vienen detrás cuándo va a cambiar de canal, dar la vuelta en "U" o el preciso momento en que está frenando. Si están perfectamente alineadas, las delanteras garantizan un alumbrado adecuado de la carretera y evitan deslumbrar a quienes van en sentido contrario.
Limpiaparabrisas
Su buen estado es crucial para garantizar la visibilidad del camino y poder manejar con seguridad, particularmente si lo sorprende la lluvia. Vierta suficiente agua en el vidrio y encienda el limpiaparabrisas. Si las gomas no la barren uniformemente, puede que estén desgastadas; no dude en cambiarlas. Unas gomas vencidas también rayan el parabrisas y empeoran la visibilidad. Verifique que el depósito de agua esté lleno. Si le hace falta, agregue agua filtrada y un chorrito de jabón líquido.
Dentro del auto
Asegúrese de que todas las luces y medidores del tablero funcionen. Verifique los indicadores de las luces altas y bajas, la carga de la batería, el nivel y temperatura del aceite, la temperatura del radiador, el nivel del refrigerante y la gasolina, el velocímetro.
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